desde la revuelta armada en 1920 que ganaron los Obregón y Elías Calles, caracterizado por el reparto del poder oligárquico que ha oprimido al pueblo sonorense.
Desde ese momento en Sonora es una regla de control que determinan los grupos de poder con el crecimiento de la riqueza para unos cuantos burgueses y la distribución de la pobreza para la generalidad de la clase campesina y la explotación sobre los obreros de la industria y la mina.
El pueblo de Sonora en los últimos 90 años ha padecido engaño, miseria, migración, opresión, despojo, desesperanza e injusticia. La revolución en Sonora a pesar de sus dirigentes, nunca fue revolución.
Ahora el PRI con un Elías y el PAN con otro Elías posicionan a esta oligarquía con la seguridad de no perder el dominio sobre el Estado. Y otra familia poderosa como los Robinson Bours se siente garantizada con cualquiera de los dos, aunque prefiera al “vaquero”.
UNO
Alfonso Elías es una persona de pocas palabras, sin dotes políticas, sin cualidades de dirigente y hasta puede decirse sin capacidad intelectual. Pero es un alfil del poderoso clan Bours Castelo para continuar con su proyecto capitalista y de acaparamiento particular.
El Elías colorado, es gana-ganadero, tiene bajo su propiedad miles de cabezas de las mejores reses, no es de esos ganaderos con animales de pastoreo, ¡no!, sus empresas tienen los mejores estándares de calidad y exporta a Europa y a Japón, es un mega productor de carne roja junto a otros dos ranchitos con miles de cabezas de ganado.
Aunque siempre ha radicado en Hermosillo, nació y se crió en Arizpe en los ranchos de su padre Ignacio Elías pero pronto dejó de vivir en el campo para hacerse un “vaquero” urbano y administrar sus empresas ganaderas desde una oficina.
DOS
Padrés Elías nació en Cananea bajo el manto de una de las familias (ganadera también) mas adineradas de ese pueblo minero y su principal antecedente político es que fue el coordinador de la campaña electoral de Ramón Corral excandidato del PAN a la gubernatura, o sea se las sabe todas y por ello es un contrincante a temer ya que perdieron ante Bours o se las quitó por una décima porcentual de votos.
Cumpliría 41 años al tomar protesta como gobernador y seria relativamente joven para aplicar el mismo modelo derechista del PAN en estados como Guanajuato, Jalisco o Baja California.
El Elías azulado solo representa la defensa del modelo panista acaparador que no tiene muchas diferencias con la forma y el fondo con los que gobierna el PRI. Y defendería desde luego los intereses fincados en las empresas de las grandes familias que detentan tierras, empresas y cuentas en bancos extranjeros.
Los dos Elías son primos y ni tan siquiera tienen diferencias entre familias, solo los distingue el color, uno azul otro rojo, como la pepsi cola y la coca cola. Sus proyectos bien pueden cantar a Juan Gabriel: “te pareces tanto a mi, que no puedes engañarme”.
ENTRE UNO Y DOS
El Big Cola, y vaya que Big, mide 1.92 metros de estatura, dice que se va a registrar cuando el PRI lance la convocatoria. Puede que pase una de dos, que se registre o que termine aceptando una pluri. Si se registra, de todos modos es muy difícil que sea aceptado por la oligarquía boursista.
Gándara a pesar de ser heredero de una familia poderosa con extensos bienes raíces y una corporación hotelera, no es el gallo preferido y se esta saliendo del guacal.
El alcalde capitalino muestra síntomas de rebeldía, pero que no tiene visos de crecimiento, a menos que encabece todo un polo ciudadano. Pero su alineación política que ha mostrado el cobre deja poca esperanza para oportunistas como la corriente derechista de la nueva izquierda del PRD que pueden vender hasta los calzones.
LOS ELIAS
Son herederos de los principales acaparadores de tierra desde 1880 en Sonora. La familia Elías en Sonora tuvo gran importancia por su riqueza y la extensión, el número y la calidad de sus haciendas y de sus ranchos.
Esta familia logró concentrar en su poder una extensión de 234 mil 488 hectáreas y también 58 áreas y 45 centiáreas de terrenos, a lo que hay que agregar que en aquellos tiempos los sitios de terrenos eran muy largos y muy anchos, según dicen aquellos rancheros, queriendo con ello significar que las extensiones señaladas por los títulos generalmente se duplicaban en la realidad. (registros de los archivos del Gobierno del Estado).
Entre los reconocidos propietarios de miles de hectáreas y tatarabuelos de los actuales Elías, son José Joaquín Elías de Zayas, Ignacio y Rafael, ambos de apellidos Elías González y Romo de Vivar (de Arizpe), José Elías Redondo, Rafael Elías González y Cajigas, Joaquín V. Elías, Juan Elías, Florencio Elías.
DON RODOLFO
Y el cabeza del clan no cabe duda es el tan nombrado que hasta una calle de Cd. Obregón lo lleva, hijo del general, gobernador de 1931 a 1935 y presidente municipal en 1952. Bisabuelo de los dos Elías, líder de la burguesía sonorense por ser de los principales promotores de uniones de crédito, de la agricultura extensiva de riego y de la forma de conducir el régimen político, el ingeniero Rodolfo, que si bien no era de apellido Calles lo heredó de Don Plutarco.
EL MISMO PROYECTO
El proyecto de los Elías pertenece a los Elías Calles y a los Obregón, a los Robinson Bours y a los Mazón, a los mas ricos de Sonora, que tienen negocios en el extranjero y tienen en la mira mas negocios y acumular mas capital valiéndose de la costa, de la mina, de la agricultura y el agua, de las empresas y la negociación con la inversión trasnacional.
El proyecto de los Elías tanto el azul como el colorado, no es del pueblo, no es de la amplia mayoría sonorense que se rasca con sus propias uñas.
Es un proyecto acaparador, de privilegios, de corrupción y de narcotráfico.
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